En el taller ecológico se realizan diferentes manualidades con materiales que puedan ser reciclados. Fotos: IRENE G. RUIZ

La fundación Balears Sostenible nace en julio de 2004 en Valldemossa (Mallorca) con la intención de promover el desarrollo sostenible en el archipiélago balear. El desarrollo sostenible permite satisfacer las necesidades que las personas tienen en el presente sin poner en riesgo la satisfacción de necesidades futuras. Asimismo está estrechamente ligado a la responsabilidad de las personas que se consigue mediante la concienciación. Es en este punto donde la fundación trabaja con diferentes tareas, como por ejemplo, talleres ecológicos en escuelas durante el invierno y, en verano, los talleres pasan a desarrollarse a las playas con los que se pretende promover el respeto por el medio natural y su ciudado.

Los talleres ecológicos estivales se iniciaron en toda Balears el año pasado. El proyecto tuvo tan buena acogida que este año se ha prolongado durante todo el mes de agosto por las Pitiüses. De martes a domigo y con un amplio horario (de 10 a 13 y de 15,30 y de 18,30) se puede encontrar desde principios de este mes el taller ecológico por diferentes playas de Eivissa y Formentera. Durante el día de ayer, el taller se encontraba en la playa de Santa Eulària. Por la mañana, el delegado de Turismo, José Luis Clapés, visitó el taller y comentó: «Sobre todo va destinado a los niños pero en muchas ocasiones son los padres los que más se interesan por estos talleres porque suelen desconocer el tema». En los talleres niños de todas las nacionalidades y con edades comprendidas entre los 3 y los 12 años realizan manualidades con cartón, botellas de plástico y cualquier material que pueda ser reciclado. Asimismo también se reparten conos de cartón para que la gente que fume. «Con las botellas hacemos jarrones, flores, con el cartón hacemos serpientes, máscaras, un poco de todo», cuenta una de las monitoras. Hasta el momento en las Pitiüses han visitado el taller unos 180 niños y se espera llegar al total del verano pasado, unos 3.000 niños en todo Balears.

María José Real