Pese a este aumento de las urgencias en julio y que sigue durante este mes, el número de ingresos disminuyen un 2,4%. Por esta situación, la Gerencia del Àrea de Salud atribuye el incremento de las urgencias a las denominadas «patologías banales», que no requieren ingreso y que se trata de los casos propios de esta época del verano: quemaduras solares, insolaciones, picaduras de insectos, gastroenteritis. El Àrea de Salud recomienda a los usuarios que llamen al 061 para realizar una consulta telefónica o que acudan al puesto de atención continuada que el caso de Eivissa a Es Viver que está abierto durante toda la noche.
«La gente utiliza muy mal las urgencias. Todos van allí», se lamenta el personal sanitario de este servicio consultado que recomienda que acudan a las urgencias de primaria. Un ejemplo llamativo es que se atiende una veintena de urgencias pediátricas al día que los facultativos atribuyen a este abuso del servicio. Los lunes es el día que registra un pico más elevado de demanda del servicio.
Entre las patologías más frecuentes atendidas, además de las mencionadas, durante este verano figuran las otitis externas, procesos virales, traumatismos ocasionados por accidentes de tráfico hasta por caídas de escalera y un elevado número de traumatismos de carácter leve: esguinces de tobillo, golpes en el dedo o heridas. También se atienden cólicos nefríticos y biliares, apendicitis o infartos de miocardio «En Urgencias se ve todo, es como un libro abierto», comentan.
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