Una vecina de Sant Francesc de s'Estany, María Cardona, se ha encargado de recoger y entregar al Consell un total de 545 firmas para evitar el exceso de velocidad en la entrada del núcleo de Sant Francesc de s'Estany, en la carretera que lleva a ses Salines. Esta vecina denuncia que en la curva se producen un gran número de siniestros, algunos de ellos mortales. «He calculado que, como mínimo, se produce un accidente mortal de media cada año y otros tantos muy graves», explica María, que añade que en la zona hay un disco «que nadie respeta» que prohibe conducir a más de 50 kilómetros por hora.

El último accidente grave que hubo fue a principios de junio, cuando un conductor bebido embistió a gran velocidad una furgoneta parada con el resultado de cinco personas heridas, dos de ellas graves. También en el mismo punto, hace dos años, falleció un empresario navarro que se estrelló con un Porsche y cayó en un estanque.

Por todo ello, esta vecina pide que desde el Consell busquen soluciones. «Que pongan topes en el suelo, badenes, un semáforo o un radar, me da igual, pero que sea algo que sirva para que la gente circule más despacio», dice esta vecina, que asegura que la mayoría de los coches pasan por allí a más de 100 kilómetros por hora. En el último acidente grave, según le informaron los agentes, el conductor iba a 180. «Es una recta y la gente se embala mucho y esto es un pueblo pequeño, en el que también hay una parada de bus; un día atropellarán a algún grupo de ciclistas o a un niño», teme María, que tiene un negocio justo enfrente de la iglesia y asegura que oye frenazos a diario. «Desde siempre vivo aquí y ya desde niña recuerdo que había accidentes», añade. Las firmas se entregaron el lunes en el Consell, donde le dijeron que ya recibiría alguna respuesta.