Amnesia, una de las discotecas más prestigiosas de Eivissa, abre sus puertas diariamente para ofrecer a los visitantes un espectáculo único de luz y sonido en el que las gogós son las encargadas de dar color a la sala con sus bailes y estilismos.

Sus vidas transcurren inmersas en la oscuridad de la noche y en el ambiente festivo de la isla aunque nunca deben olvidar que no están de fiesta sino que trabajan por y para la fiesta. «Tenemos que tener la cabeza sobre los hombros porque no estamos de fiesta con amigas sino trabajando, por lo que no hacemos nada que pueda afectar al trabajo», dijo una de ellas.

La vida nocturna está sumida en un ambiente lleno de imprevistos por lo que las gogós tienen que tener una personalidad muy definida.«Una gogó tiene que ser extrovertida y adaptable a lo que pueda pasar pasar», aseguró Fátima Hernández, jefa de animación de la sala que añadió: «Bailar y poder transmitir lo que sientes a la gente es algo precioso pero también tienes que ser consciente de que esto dura sólo unos años y hoy eres la estrella pero mañana llegará gente más joven y con más ganas y te quedarás atrás».

Para una gogó el vestuario cumple una parte fundamental en la puesta en escena. Ximena Topolansky es una conocida diseñadora encargada de transformarlas en sensuales geysas, en agresivas luchadoras romanas o coloridas hippies. «Nuestros trajes son llamativos pero cómodos y elásticos para favorecer el movimiento al bailar», explicó Fátima Hernández.

De hecho, las gogós de Amnesia se diferencian del resto por su estilo de baile muy marcado y aeróbico con el que transmiten fuerza y energía al público en cada pase que realizan.

Irene Luján