El fiscal del caso Cretu, Antoni Torres, ha pedido la declaración como testigos de la miembro del GEN Neus Prats, el periodista Joan Lluis Ferrer y el ex concejal ecologista Pep Ribas, éste último en la oposición en 1997, cuando se concedió la licencia a la mansión del músico rumano.

De esta forma, se podrá aportar luz sobre si los imputados -el ex alcalde de Sant Antoni y cuatro concejales del equipo de gobierno de entonces- conocían la problemática y las denuncias ecologistas que existían en torno a la casa por hallarse la misma sobre la cima de una montaña, un lugar en el que ya entonces estaba prohibido edificar.

El fiscal remitió el escrito anteayer sobre el que ahora deberá decidir el juez de instrucción del caso, Juan Carlos Torres, que la semana pasada tomó declaración como imputados a los cuatro concejales que participaron en la comisión de gobierno que dio luz verde a la licencia, Blanca Castiella, José Prats, José Ramon Serra y José Cardona. Los ediles, ante las preguntas del juez, se escudaron en los informes técnicos favorables que dijeron haber obtenido y en los cuales se basaron para conceder esa licencia al músico rumano Michel Cretu. Todavía está pendiente la declaración de otro imputado, en este caso el ex alcalde de Sant Antoni, Antoni Marí Tur, que alegó motivos de trabajo para no acudir. El juez Juan Carlos Torres debe resolver ahora si le llama a declarar o si archiva las diligencias, una decisión que puede ser inminente.