El Govern sostiene que no es necesario pedir licencia municipal para montar la planta de cemento de Sant Jordi. Para ello se basa en dos informes jurídicos, uno del letrado del departamento y otro de la abogacía de Presidència, en los que se concluye que las plantas provisionales adheridas a una obra no necesitan ni licencia de obra ni de actividad. Estos dos informes ya han sido remitidos al Ayuntamiento de Sant Josep, que la semana pasada solicitó al Govern que le informara de si pensaba pedir permisos, porque de lo contrario tendrían que paralizar la planta. Asimismo, este fin de semana la Policía Local, a instancias de los vecinos, ha levantado acta de los trabajos de montaje de la cementera que se están llevando a cabo en la calle Avets en Sant Jordi.

El Ayuntamiento de Sant Josep, por su parte, informó ayer de que respeta los informes jurídicos remitidos por la conselleria. «No ejerceremos ninguna acción en su contra», reza la nota de prensa enviada ayer por el Consistorio.

La consellera de Obres Públiques, Mabel Cabrer, asegura que están actuando como lo hace el Ministerio de Fomento y como lo hacen las diferentes comunidades autónomas. «Actuamos así en coherencia a lo que también se hizo con el Ayuntamiento de Sant Antoni, el de Sa Pobla, el de Calvià y el de Ciutadella», insistió la consellera, que aseguró que hay que tener un mínimo de coherencia a nivel de administraciones. «No se puede decir aquí sí y aquí no».

Los informes jurídicos sostienen que ni la licencia de obras ni la de actividad son necesarias si se encuentran integradas dentro de un proyecto de gran infraestructura viaria acometido en ejecución del Plan Director Sectorial de Carreteras. Lo único necesario es contar con un estudio de impacto ambiental, ya aprobado.