Jean-Charles, Claire, Marko y Sol, ayer, muy cerca de los que les inspira: el mar. Foto: IRENE GARCÍA

Para ellos, vivir en una isla que invita a la inspiración es positivo a la hora de crear aunque lo difícil sea tocar en vivo para presentar su trabajo.

Por ello, los integrantes de Fous de la Mer (Locos por el mar) hacen como tantos otros creativos y artistas que residen en Eivissa: aprovechan el ambiente de inspiración, toman aire y se sumergen en un estudio para componer, y después ofrecen su música por distintos lugares del mundo, sobre todo en Frankfurt (Alemania), donde alcanzaron el número 1 de los charts de chill out con la canción «Never stop loving» de su primer álbum «Star and Fishes».

Ahora presentan «Ultramar», su segundo disco, que también está basado en sonidos chill out, con bases electrónicas y deep house, cantos de sirena y sonidos de mar: «No es tan fácil tocar aquí, sobre todo por el tema de las licencias para música en los bares», comenta Sol Ruiz, la vocalista del grupo, que está formado también por el productor y tecladista Marko Bussian y por el bajista Jean-Charles.

«Fus de la Mer nació en el invierno del 2001 y hasta ahora hemos tocado en diferentes lugares como Sa Trinxa, Guaraná y la Casita Verde. Donde actuamos cada año es en Alemania, en una entrega de premios de films publicitarios, agrega Sol, que destaca que la música de «Fous de la mer» tiene alma internacional ya que Marko es nacido en Austria, Jean-Charles es francés, ella es argentina y en Frankfurt tocan con un percusionista de Brasil. Eso sí, sin olvidar a Claire Dietrich, una alemana que colabora como vocalista.

Según Sol, las canciones de «Fus de la Mer» hablan de amor, de sueños, de sensaciones y de momentos de ensoñación. De «Ultramar» han editado 1.500 copias, que llegarán a la isla a mediados de julio. L.A.