La Direcció General d'Acreditació i Avaluació de la Conselleria de Salut detectó que 68 clínicas dentales de las Islas no estaban inscritas en el registro de centros sanitarios, un 20,17 por ciento de los establecimientos que fueron inspeccionados durante la campaña que llevó a cabo en este sector en 2005.

La campaña de inspección concluyó con el cierre de dos centros -uno por deficiencias de infraestructura de imposible reparación y otro por la falta de profesional titulado- y la apertura de seis expedientes sancionadores, cuatro de ellos por no solicitar la autorización de funcionamiento, después de que la Administración lo había requerido reiteradamente, otro por irregularidades en la eliminación de residuos biosanitarios y otro, a uno de los dos centros cerrados por incumplimiento de la resolución de suspensión de actividad.

Así lo explicó ayer el director general d'Acreditació i Avaluació, Jaume Orfila, acompañado del presidente del Colegio Oficial de Odontólogos y Estomatólogos de las Islas, Guillem Roser en la presentación de los resultados de la campaña de inspección a clínicas dentales.

La campaña de inspección ha contado con el consenso del colegio, tal y como indicó su presidente Guillem Roser quien dijo que este es «un primer paso para luchar contra el intrusismo» en el sector y pidió a los ciudadanos que sigan criterios de «confianza» a la hora de elegir a su dentista y soliciten «garantías» de que les atiende un profesional.