Los proyectos de carreteras de Eivissa centraron una parte del debate del Parlament en el que hubo un intercambio de acusaciones de manipulación y crispación entre el PP y el PSOE. Joan Boned, del PSOE, recordó a Cabrer que en los autos judiciales, si bien dicen que no se pueden suspender cautelarmente la paralización de las obras, «no se niega ciertas irregularidades, como la ausencia de representantes municipales o la ausencia de inscripción del estado de la finca». Boned reiteró que hay «una ocupación irregular e ilegal de unos terrenos» y aludió al «ridículo del Consell» al enviar a los Bomberos a limpiar una carretera en vez de hacerlo la empresa de las obras. La consellera reiteró «que se ha hecho un trabajo muy escrupuloso y depurado por parte de los funcionarios, puede haber errores porque son más de 400 expedientes pero los tribunales nos dan la razón».

Esta no fue la única intervención de Cabrer ayer en el Parlament acerca de los proyectos de las carreteras, ya que el diputado ibicenco Vicent Tur, también del PSOE, le preguntó a la consellera si pensaba parar la ejecución de los macroproyectos.

«No se hacen macroproyectos, sino carreteras necesarias y seguras, consensuadas con el Consell. Los proyectos y las obras que se hacen son a instancias del Consell que puede solicitar al Govern todas las medidas que crea conveniente», respondió Cabrer. Tur le recordó a Cabrer que «en el plan director sectorial de Carreteras se contempla un vial de tres carriles en la carretera de Sant Antoni y están haciendo una autopista» y la Ley de Carreteras no prevé nuevos trazados no previstos en el plan director. «Puede sembrar todas las dudas que requiera, pero hay cuatro autos», le espetó la consellera.

Cabrer aseguró que «nunca se ha hecho tanto esfuerzo en Eivissa de intentar negociar» y defendió la necesidad del proyecto Eivissa. Sant Antoni, ya que la actual carretera «no aguanta más accidentes y saturación». Otra pregunta, relacionada también con Carreteras, centró la intervención de la diputada socialista Pilar Costa que preguntó al conseller d'Educació, Francesc Fiol, acerca del expediente aún no resuelto acerca de la presencia de alumnos en una manifestación el pasado 25 de enero. «No manipulamos, sino queremos que en horario escolar los alumnos vayan a clase», dijo Fiol.