El conseller balear de Treball i Formació, Cristòfol Huguet, informó ayer en Eivissa, junto al presidente del Consell, Pere Palau, que el año pasado se produjo «un cambio de tendencia en el mercado laboral de las Pitiüses, con la creación de puestos de trabajo más elevada de los últimos cinco años, y un descenso en las cifras del paro». Huguet aseguró que la última vez que las Pitiüses cerraron un año con un descenso en las cifras del paro se remonta a 1997 aproximadamente.

El número de personas ocupadas pasó de 42.275, en 2004, a 44.648, lo que supone un incremento del 5,6 por ciento, debido en parte al proceso extraordinario de regularización realizado por el Gobierno central en el primer trimestre del año pasado. Este aumento se sitúa por vez primera en los últimos cuatro años por encima de la media nacional, cuya subida se ha quedado en el 4,4 por ciento.

Huguet destacó el hecho de que a principios del año pasado uno de cada cinco personas contratadas era extranjera, proporción que a final de 2005 ha aumentado a una de cada cuatro. El proceso de regularización extraordinario ha influido en el aumento del número de contratos, aunque el conseller destacó por encima de todo «la confianza del empresario». Indicó Huguet que el aumento de contratos extranjeros se ha notado en las tareas de asistencia domiciliaria y la construcción.

El presidente del Consell, Pere Palau, aseguró que estas cifras «clarifican» el debate que desde hace un tiempo se mantiene sobre el balance negativo de la temporada turística. «Estos indicadores demuestran que existe una evolución económica y un aumento en la creación de empleo». Criticó el presidente que se «cree alarma» con afirmaciones de que «la temporada va mal o que bajan los ingresos turísticos», cuando en verdad las cifras del mercado apuntan hacia «un crecimiento económico».