El Ayuntamiento de Sant Antoni ha invertido cerca de 65.000 euros en obras para la mejora del cementerio, y, en concreto en la construcción de 150 nuevos nichos, que se han habilitado tras reconstruir el bloque más antiguo que existía en el camposanto y hacer una altura más, en total 5 pisos de nichos. Pero los arreglos no se han limitado a estas obras, sino que también se ha pavimentado la zona y se ha instalado drenaje, se ha mejorado la iluminación, se han colocado bancos, y se ha repintado todo el recinto, todo ello para que el camposanto esté en perfectas condiciones mañana, Día de Todos los Santos y el miércoles, Día de los Difuntos, las dos fechas en las que los cementerios reciben el mayor número de visitas.

También en el cementerio de Sant Rafel se han construido este año 50 nichos y 18 en Santa Agnès, según aseguró el concejal responsable de este área,Vicente Costa.

Por otra parte, la administración municipal tiene en proyecto hacer dentro de esta legislatura un nuevo cementerio en Sant Antoni, en la zona norte de Can Coix, en un solar adquirido por el Consistorio que abarca un trozo de la antigua cantera conocida como sa Pedrera y un área boscosa. Entre otros servicios, el Consistorio de Sant Antoni baraja la posibilidad de hacer un crematorio, el primero que tendrían las Pitiüses. Según el avance de anteproyecto con el que trabaja el Ayuntamiento, el cementerio permitirá duplicar la capacidad del actual. En concreto, se ha proyectado hacer cerca de 4.500 nichos en el interior de la cantera y una zona en el área boscosa con 100 capillas.