La remodelación del puerto de Eivissa lleva coleando cerca de dos años.

«El problema es que todos los cruceros quieren ir a la ciudad de Eivissa y no se puede», apuntó Verger, quien instó a la necesidad de avanzar en la cuestión (que ya lleva más de dos años) de la remodelación del puerto de Eivissa: «Todos los problemas que están surgiendo ahora, persistirán en el futuro y cada vez serán mayores». Además, y en referencia a la situación de las conversaciones con el Ayuntamiento de Eivissa, el presidente de la Autoritat Portuària destacó «haber perdido, después de tanto tiempo, la ocasión de consenso».

En el caso de que Autoritat Portuària dragase el puerto interior de Eivissa el problema no se solucionaría, según Verger, «ya que no pueden entrar buques de gran eslora». Además, instó a la necesidad de que el nuevo dique de Botafoc cuente con «las instalaciones adecuadas». Esta reclamación también fue anunciada la pasada semana por Fomento del Turismo, al solicitar unas infraestructuras de calidad.

En este sentido, Verger señaló que todas las peticiones que reciben por parte de las empresas consignatarias son para fondear los grandes buques en el muelle interior: «Todos aquellos que solicitan su entrada en el dique de Botafoc tienen cabida y nosotros estamos encantados, pero son pocos». Esta negativa por parte de las navieras de fondear en el nuevo dique se debe a la inexistencia en la explanada de servicio alguno.

El presidente de Autoritat Portuària pasó el miércoles en Eivissa en compañía del presidente del Consell Insular, Pere Palau, según comentó a este periódico. En este encuentro, Palau le transmitió las quejas recibidas por las múltiples incomodidades de las instalaciones portuarias. En este sentido, el presidente del Consell comentó que le transmitirá por escrito todas las quejas que reciba. Verger, por su parte, prevé una reunión con el Ayuntamiento de Eivissa en un plazo de tiempo corto. En esta reunión se intentará consensuar el futuro del puerto de Eivissa.