El Pleno del Consell Insular, que se alargó cerca de cuatro horas,
aprobó ayer, por mayoría simple y con la abstención del Pacte, seis
propuestas para la actualización de las tasas en las escoletes, en
la utilización de las instalaciones del centro de exámenes de
conducir y en los servicios de la ITV, así como también en el uso
de las instalaciones del complejo deportivo de Es Raspallar, en
materia de ordenación territorial, de urbanismo, habitabilidad y
litoral, y en el control de la calidad de las obras públicas de la
red de carreteras de las Pitiüses.
La consellera d' Hisenda del Consell Insular, Stella Matutes,
consideró necesario «poner al día estas cuentas que necesitan
disminuir la brecha existente en la actualidad entre costes y
precios». Para la consellera, «subir los impuestos es algo
necesario y positivo para todos ya que un sistema deficitario no
puede ser de calidad ni puede crecer», a lo que añadió: «En este
tipo de casos es necesario renovarse o morir». La consellera quiso
dejar claro que en los casos de las escoletes y del centro
deportivo de Es Raspallar «no se pretende subir los precios de
estos servicios sino ajustar las tarifas para actualizar unas
cuentas que desde 2002 están congeladas». De este modo, según
Matutes, aunque ambos servicios sociales seguirán siendo altamente
deficitarios, pasarán de tener un déficit de 1,4 millones de euros
a rozar el millón recaudando entre en 15 y el 20% de sus costes
reales. Con respecto al incremento en las tasas de la ITV, Matutes
destacó «que, aunque éstas aumentan, seguirán estando por debajo a
las del resto de España».
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