La APNEEF, una asociación formada por padres con hijos que presentan necesidades especiales por tener minusvalía psíquicas o físicas, organizó ayer una jornada especial en Formentera para fomentar el intercambio entre los niños de ambas islas y entre los padres de los mismos.

La presidenta de APNEEF, Carmen Villena, explicó que «un grupo de padres que después de varios años viendo que no había actividades para niños de 0 a 17 años con necesidades especiales, decidimos crear en 1998 esta asociación porque cuanto existía estaba dedicado únicamente a los discapacitados adultos».

Al principio empezaron haciendo actividades extraescolares con un equipo multisdisciplinar compuesto por fisioterapeutas, logopedas y psicólogos, y paralelamente pusieron en marcha uno de los trabajos más importantes de la APNEEF, el apoyo y orientación para los padres. «Cuando nace un niño con problemas muchas veces los padres se encuentran con él en brazos en la puerta del hospital, y muchas veces sin un diagnóstico o incluso cuando existe, en la mayoría de las ocasiones no saben dónde ir».

La actividad que están realizando en Formentera se enmarca dentro de la programación de verano que han podido efectuar gracias a una iniciativa de un grupo de artistas que cada quince días se reunía en 'Km5' y que en septiembre subastaron las obras realizadas y el dinero recaudado se dirigió a este proyecto lúdico.

Todo el año
Enrique Jiménez, coordinador de las actividades, animó a los padres de Formentera en situación problemática a que la próxima semana acudan a Can Dog en Eivissa donde están previstas actividades con caballos y otros animales.

Si este verano todo sale bien la APNEEF confía en que el próximo año en lugar de cinco fines de semana las actividades puedan realizarse durante todo el año. Tras el baño en la Playa de es Pujols, los chicos comieron en el restaurante Sa Parada.