El presidente de Pimeef-Restauración, Eduardo Duque, durante su intervención, expresa su preocupación por estos tres años consecutivos de caída de las ventas que en el sector que representa llega incluso al 30 por ciento.

Los empresarios del sector de la oferta complementaria de la Petita i Mitjana Empresa d'Eivissa i Formentera (Pimeef) han comenzado la temporada turística con descenso de las ventas, como mínimo, de un 20 por ciento, y piden soluciones para hacer frente a esta situación. Entre los empresarios se respira «inquietud y preocupación ante el flojo inicio de la temporada», dijo el vicepresidente de la Pimeef, Alfonso Rojo, ante los primeros datos de ventas. «Son unos números que no se habían dado desde hace tiempo», añadió.

Los sectores de comercio, restauración y mayoristas de alimentación dieron a conocer algunos de los temas que les preocupa, como el todo incluido, «que creemos que no está haciendo bien en Eivissa», añadió Rojo. Los empresarios demandaron al Govern que regule la modalidad «para marcar unos mínimos sobre los que se tiene que mover». Hasta ahora, aseguraron, que «está yendo muy por libre, ya que el propio empresario es el que marca esos baremos de calidad que quiere y muchas veces, acuciado por la imperiosa necesidad de llenar sus hoteles, se está rebajando a un mínimo inadmisible la calidad de lo que se está ofreciendo».

Los empresarios aseguran que esta circunstancia está relacionada con el poder adquisitivo de los turistas, con lo que «la oferta complementaria se ve casi aniquilada». También recordó que «hay cadenas hoteleras, de reciente creación, que están trabajando a unos precios irrisorios, por debajo incluso del coste del todo incluido». Ante esta situación, piden a los establecimientos que ofrezcan el todo incluido que no pasen por debajo de un nivel de calidad mínimo para la isla para evitar dar una mala imagen. «No podemos permitir que un turista se vaya hablando mal de Eivissa porque no le han tratado bien en el hotel, en el restaurante o le han robado en la playa», dijo Rojo.

La restauración, que engloba a bares, restaurantes y cafeterías, es uno de los sectores más afectados, con un descenso de ventas que oscila «entre un 20 y 30 por ciento». La crisis afecta, sobre todo, a medianos y pequeños empresarios de zonas como Platja d'en Bossa y la bahía de Sant Antoni, en especial el West End.

Francisco Ramón, de la Asociación de Comercio, comparte también las inquietudes por la situación del sector, que ha llegado incluso a bajar los precios. «Hace falta una remodelación de todo el sector, no sólo del comercio», demandó.

Los mayoristas de alimentación tampoco atraviesan una época de bonanza. Vicente Madrid aseguró que «hay comercios que han visto bajar la caja hasta un 50 por ciento». Advierte de que «si en julio y agosto no se recupere, van a tener que cerrar». También mostró su indignación por las pocas ayudas que reciben por parte de la administración en el transporte de mercancías, ya que encarece los productos en las islas.