La vicepresidenta del Govern, Rosa Estaràs, anunció ayer que el Ejecutivo ha decidido retirarse de la negociación del nuevo convenio de carreteras para ceder todo el protagonismo a los consells. A partir de ahora serán las instituciones insulares quienes negocien, proyecten y ejecuten la totalidad de las obras de carreteras en sus respectivos territorios, «en aras al consenso», según aseguró Estaràs.

El Govern ha ido más allá e incluso ha encargado un informe a sus servicios jurídicos que asegura que los consells pueden recibir la encomienda de gestión con el fin de adelantar las obras. «El Govern da un paso atrás para dar todo el protagonismo a los consells», añadió. A preguntas de si la retirada del Govern se debían a las críticas de UM por la mala negociación en la materia, la vicepresidenta se limitó a contestar que como el Govern está seguro de que los consells negociarán «muy bien», todos quedarán «encantados».

En total, la petición económica que formula el Consell de Mallorca asciende a 300 millones de euros a los que habrá que sumar otros 50 millones más en concepto de expropiaciones, mientras que las peticiones formuladas por el Consell de Eivissa y Formentera llegan a los 190 millones y las de Menorca, entre 60 y 70 millones.