El Ayuntamiento de Sant Antoni llevará a pleno mañana el convenio de colaboración que tiene previsto firmar con la Conselleria balear de Comerç para llevar a cabo la reforma y rehabilitación integral del casco antiguo de Sant Antoni, acción que se enmarca dentro del plan de actuación comercial del municipio. A través de este acuerdo, el Govern aportará cerca de 6,5 millones de euros, cantidad que irá pagando en varias anualidades hasta 2014. Por su parte, el Consistorio tendrá que aportar el 50 por ciento del coste total en los mismos plazos.

La administración balear ya se comprometió a aportar 600.000 de los 898.000 euros que cuesta la reforma de la calle Ample, una obra que se inició en noviembre y con la que dio comienzo el proyecto de remodelación integral del casco antiguo. La nueva aportación de la administración balear permitirá sufragar el coste de la rehabilitación del resto de calles de la zona. La ambiciosa actuación, ideada con la voluntad de reactivar el comercio en este área, tiene un presupuesto global de 14.898.000 euros y la previsión es que se realice en tres años. Afecta además de a la calle Ample, a las vías Sant Antoni, Colón, Bartolomé Vicent Ramon, Bisbe Torres, Antoni Riquer, La Mar, de Rossell, Bisbe Cardona, Progrés, Cervantes, Sant Mateu, Soletat y Santa Agnès.

Por otra parte, la corporación municipal aprobará la modificación de las tarifas de abastecimiento de agua que supondrá «una subida global del 6 por ciento», según aseguró el concejal de Hacienda, Joan Riera. Este aumento permitirá «que el Consistorio no sea deficitario en el abastecimiento de agua y pueda cubrir el fondo de mantenimiento de la red actual». El edil especificó que se establecerán tres tramos. En caso de que el consumo no rebase los 30 metros cúbicos de agua se producirá una bajada de la tarifa de algo más de un 1 por ciento. En el segundo tramo, entre los 30 y 60 metros cúbicos, aumentará el precio alrededor del 14 por ciento y en el último tramo, de 60 metros cúbicos para arriba, subirá casi un 20 por ciento. Riera aseguró que «el 67 por ciento de los recibos que se emiten van a bajar un 1 por ciento».