Con más de un mes de retraso se pondrá en marcha el próximo viernes un tratamiento específico en las fosas sépticas del municipio de Eivissa para reducir los malos olores en la red de alcantarillado. El delegado del Instituto Balear de Saneamiento (Ibasan) en las Pitiüses, Juan Carlos Martín, explicó que la actuación se realizará inicialmente en 70 pozos negros «en las zonas donde se ha localizado mayor concentración de sulfhídricos» y que comprenden, entre otras, las calles Madrid, Abad y la Sierra, Vicent Serra, Arzobispo Cardona Riera, Isidoro Macabich y Vara de Rey.

Está previsto que la actuación se prolongue durante cuatro meses y que finalmente se aplique en algo más de 300 fosas sépticas de dominio público. El tratamiento consistirá en verter inicialmente en cada fosa séptica tres litros de un producto que contiene enzimas biológicas para reducir el nivel de sulfuros, causantes de los malos olores. Posteriormente casa semana se aplicará un litro del producto y se hará un seguimiento para comprobar la efectividad de la actuación.

Según lo que se acordó en el convenio que firmaron a principios de julio el Ibasan y el Ayuntamiento de Eivissa, el Govern es el encargado de financiar el tratamiento, que tiene un coste aproximado de 60.000 euros, y el Consistorio quien aportará el personal para llevarlo a cabo.

Es la primera vez que se actúa sobre la red de alcantarillado directamente con este tratamiento que habitualmente se utiliza en pequeñas depuradoras rurales.

El concejal de Urbanismo del Consistorio de Eivissa, Vicent Torres, explicó que se aprovechará esta actuación para ir eliminando las cerca de 600 fosas sépticas que se calcula que hay en el municipio y que son responsables en parte de los malos olores que origina la planta depuradora.