El Govern balear proyecta construir un gran parque solar en Santa Eulària para suministrar energía eléctrica a colegios, espacios públicos y la futura desaladora. El conseller balear de Comerç, Indústria i Energia, José Juan Cardona, explica que se trata de un proyecto pionero en Balears, donde no existen infraestructuras públicas importantes para aprovechar la energía solar.

La construcción de este parque solar, que, según Cardona, puede suponer una inversión aproximada de seis millones de euros (mil millones de las antiguas pesetas), se llevará a cabo esta legislatura y servirá de «punto de referencia» en toda Balears. El Ayuntamiento de Santa Eulària ya trabaja en la búsqueda de un terreno adecuado para la construcción de este parque solar.

La idea que maneja el Ejecutivo autonómico es la de construir una gran infraestructura para impulsar el uso de energías renovables en cada isla. Precisamente, hace unas semanas el ministro de Turismo, Industria y Comercio, José Montilla, inauguró en Menorca la planta eólica d'es Milà, compuesta por cuatro molinos. Cardona asegura que en Eivissa, por la falta de viento, no es rentable levantar una planta similar.

Sí lo es, en cambio, un parque solar debido al alto nivel de radiación que se registra en Eivissa, especialmente en el oeste de Sant Antoni y el sudeste de Santa Eulària. El conseller balear d'Industria i Energia subraya la necesidad de «incentivar la penetración del uso de energías rentables en la sociedad».

El Govern balear se ha marcado como objetivo triplicar en 2015, como fecha tope, el uso de energías renovables en las Pitiüses. Actualmente, la producción de energía renovable (sol, viento y biomasa) se sitúa en un escaso 1,5 por ciento del consumo total de energía, o del 3,3 por ciento si no se tiene en cuenta el uso de carburantes del sector del transporte.

El 70 por ciento de la producción energética 'verde' de Eivissa y Formentera deriva de la biomasa (residuos forestales, agrícolas y ganaderos) y el 30 por ciento de la radiación solar. El uso del sol como fuente energética en el conjunto de Balears supone el 14 por ciento de la producción total, lo que supone la mitad de lo que se genera exclusivamente en las Pitiüses.