El Partido Popular de Eivissa anunció ayer que exigirá al equipo de gobierno que contrate a una empresa especializada e independiente que investigue las causas y el origen del vertido fecal detectado la semana pasada en la playa de ses Figueretes que obligo a cerrar varios días la playa.

El informe, según Prats, tendrá que recoger también del estado de la bomba de impulsión y del emisario. El PP presentará una moción al próximo pleno para aclarar el origen de los vertidos.

El concejal del PP, Toni Prats, recordó que «este tipo de vertidos se producen desde hace años», aunque reconoció que éste ha sido «el más grave detectado hasta el momento» y su partido quiere que se descarte que procede de la estación de bombeo situada en la zona, que sufrió una avería horas antes de detectarse el derrame. En este sentido, afirmó que el vertido del martes «tuvo su origen en una avería de la bomba de impulsión».

Según Prats, «es paradójico y poco lógico que la misma empresa que se encarga del mantenimiento de esta estación de bombeo sea la encargada de evaluar el origen del vertido». Prats consideró «normal» que esta empresa «no se eche la culpa» y apunte a un posible vertido ilegal como origen de los restos fecales encontrados en la playa. Por ello, solicitó que se realice una investigación independiente que analice «si existen problemas de mantenimiento» para depurar si es necesario, «las responsabilidades de cada institución» ya que no se puede dar esta imagen.

A su juicio, tiene poca credibilidad la versión de que se trata de un vertido proveniente de un emisario ilegal o de una fosa séptica que haya reventado, o que el causante pueda ser «un supuesto barco fantasma», puesto que, según aseguró, «en este último caso lo más lógico es que los vertidos se disgregaran en el mar».