La larga mesa con comida típica oriental que amenizó la Fiesta por la paz y la solidaridad.

Antes de entrar en la sala de exposiciones en Cana Panera (en la antigua fábrica de cal de Sant Llorenç) donde se exhibe la muestra «India, por una globalización más humana», el ambiente que se respiraba olía a incienso; por doquier se veían saris y se podía sentir un halo de paz, tranquilidad y armonía con la naturaleza. Una vez dentro, con un ramillete de margaritas que te ofrecía una joven con vestimenta oriental, la cosa no cambiaba mucho. La decoración oriental, la figura de un enorme Buda, una fuente con nenúfares, cerámica artesanal del país, y la degustación de bebidas ecológicas y comida típica oriental, crearon un escenario real para la fiesta por la paz y la solidaridad con la que se pretendía recaudar fondos para los proyectos de ayuda a los niños y ancianos que viven en las calles de la India; un país que cuenta con trescientos millones de personas que sufren la pobreza.
La exposición permanecerá abierta hasta el 26 de junio. Las cuarenta fotografías de los artistas alemanes Martina Czolgoszewki y Peter Scherges muestran dos caras muy distintas de una misma realidad: la de la infancia las de Martina y la de los lugares y personas comunes de la India rural las de Peter. Las fotografías fueron realizadas en el último viaje que los miembros de la fundación realizaron en diciembre a aquelpaís .
Czolgoszewski es la primera vez que viaja ba a la India y con sus fotos quiere transmitir la alegría de los niños porque «hay mucha pobreza no he visto mucho sufrimiento. Son pobres en lo material pero no en lo que tienen en su corazón». En cambio, Scherges ya ha hecho muchos viajes a la India, uno cada año desde 2000, y es un experto conocedor de la realidad del país. «A mí me gusta la India antigua», dice, y en sus fotografías refleja «a la gente normal, las personas que tienen sus pequeños negocios en las calles, porque es muy bonito,ya que lo hacen todo con sus manos».
Y por si las imágenes no fueran suficientes para conseguir la sensibilización del espectador, los autores se valieron de citas espléndidas de filósofos y sabios hindúes, que encierran todo un saber y un modo determinado de entender la vida. A Isabel Díaz de la Jara, presidenta de la fundación, la cita que enmarcan las fotografías que más le gusta fue «Sólo puede crearse una sociedad nueva si ocurre un cambio profundo en el corazón del hombre», del filósofo Erich Fronn. Se decanta por ésta porque simboliza una de las ideas bases de la fundación: las soluciones a los problemas que acarrea la globalización injusta están en el cambio interior del individuo, que ha perdido los valores humanos. Mucho tiene que cambiar el individuo para que entre todos se consiga que la globalización deje de ser injusta para algunosy enriquecedora para otros , pero hay gente que se preocupa por los demás. La Fundación Manava Seva Kendra en Balears nació en el año 2000.C.V.