La reunión celebrada ayer sirvió para que se reforzaran las
conclusiones del encuentro celebrado en febrero donde se incidió en
que los programas de abordaje del conflicto juvenil e los
ayuntamientos de Eivissa y Santa Eulària son los modelos a
seguir.
Así, se acordó que se iniciarán actuaciones el curso que viene
en los municipios que no disponen de este programa: Sant Joan,
Formentera, Sant Antoni, y Sant Josep. En el encuentro se decidió,
además, marcar de plazo hasta diciembre para poner en marcha los
recursos necesarios.
El conseller de Bienestar Social, Vicent Serra, destacó «el
espíritu de consenso» con el que se desarrolló el encuentro donde
estuvo la consellera de Educación, Carolina Torres, la delegada de
Educación, Pilar Marí, los concejales de servicios sociales de Sant
Josep y Sant Antoni, trabajadores sociales, directores de
institutos, educadores y responsables del Servicio de Menores. En
la reunión se dejaron claras las competencias de cada institución,
aunque el Consell asuma las funciones de coordinación.«Si un
adolescente es remitido a Menores, pero no tiene suficiente gente
para asumirlo el problema es del Consell. Si es un trabajo de los
educadores de calle y los ayuntamientos no disponen de ellos, el
problema es del Ayuntamiento», aclaró Vicent Serra.
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