La actuación de servicios sociales está dividida en barrios y es el que se encuentra en ses Figueretes, el denominado Ponent, el que acumúló un mayor número de casos durante el año pasado.

La unidad de trabajo social de Ponent, que abarca los barrios de ses Figueretes, Cas Serres y Can Escandell, donde vive la población más joven, es la que ha registrado más aumento de casos: 421 de los 997 casos registrados en 2003. La población mayor está concentrada en la zona de Eixample, que registró 338 casos, según los datos de la memoria de Promoción Social de Eivissa de 2003.

En cuanto a las demandas, el servicio de Promoción Social atendió 2.173, 468 más que en 2002, lo que supone un 25% de incremento. El numero de demandas no se equipara con los casos, ya que una asistencia puede demandar varias peticiones. Entre las demandas más solicitadas se encuentran las prestaciones económicas, 1.033, que desde hace dos años gestionan los servicios sociales municipales.

El sector de población que hace más demandas es el referente a familia (40%), seguido de inmigrantes (22,3%), mujer (14%) y personas mayores (7,4%). En comparación con el año 2002, se ha producido un cambio en el orden ya que los inmigrantes estaban en primer lugar, un 28%, de las peticiones de demandas.

En cuanto a los inmigrantes, los servicios sociales han detectado un retraimiento del colectivo tras los acontecimientos del 11 de marzo e incluso no participaron en la última edición de la muestra de entidades solidarias cuando sí lo hicieron otras ediciones. «Tenemos más dificultad para llegar a ellos. Imagino que será un poco de recelo, les cuesta más acercarse a nosotros y hay actividades en las que vienen participando en las que no han aparecido», explicó ayer el concejal de Promoción Social, Santiago Pizarro. El colectivo de inmigrantes, sobre todo ecuatorianos, ha sido el que más demanda han hecho a servicios sociales.

Por primera vez se incluyen en las memorias sociales, que se dieron a conocer ayer en el Consell Municipal d'Acció Social, las políticas de promoción de empleo, orientación laboral, formación y la escuela infantil municipal. «A partir de ahora tenemos un reto y es que todo lo que hacemos hay que consolidarlo y empezar a establecer políticas de calidad», añadió Pizarro.