El Grup d'Estudis de la Naturalesa (GEN) criticó ayer las
declaraciones realizadas por el nuevo conseller insular de
Urbanisme, José Torres Cardona, en las que se muestra partidario de
hacer «tabla rasa» con las infracciones urbanísticas. El GEN se
muestra perplejo por el «descaro» del nuevo responsable público «al
dar cobertura a las ilegalidades que habría que combatir».
Para el GEN la tabla rasa que defiende Torres Cardona «no hace
sino situar al conseller como cómplice de especuladores e
infractores urbanísticos que deberían ser sancionados, y no
ayudados desde el Consell».
La legalización masiva representa «una bofetada hacia los
ciudadanos y promotores que deciden cumplir con las leyes» y
también «es una invitación al incumplimiento de las normativas, ya
que se estimula la anarquía urbanística, la infracción y la
especulación», dice el GEN. «Si ésta es la filosofía del Consell es
evidente que el Plan Territorial Insular será un catálogo de
legalizaciones y aberraciones urbanísticas», insiste.
«Especialmente grave es el caso de las normas cautelares y
subsidiarias de Santa Eulària, ejemplo de legalización de
infracciones que incluso están en juzgados», asegura el grupo
ecologista. «Al igual que en el caso Cretu, los políticos tratan de
cubrirse las espaldas legalizando aquello que nunca puede ser
legalizado». Si se continúa aplicando la tabla rasa de manera
sucesiva «Eivissa se encontrará cada pocos años con que se irán
legalizando las infracciones que se cometan», advierten. Las
instituciones responsables de la ordenación «se han convertido en
una fábrica de impunidad», concluye.
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