Los padres piden responsabilidades al Ayuntamiento de Santa Eulària después de que recibieran el pasado 10 de marzo una carta de la delegada insular de Educación, Pilar Marí, donde se aseguraba que el arreglo de la fachada correspondía al Ayuntamiento de Santa Eulària, ya que se trataba de una obra de mantenimiento y se tenía que contratar, de manera inmediata, a una empresa para hacerse cargo de las obras. Sin embargo, diez días después, los padres no han recibido noticias del consistorio. «Nadie se ha puesto en contacto con nosotros», dice la presidenta de la APA, Natalia Jaume.

En enero de este año empezaron a producirse los primeros desprendimientos en la fachada del colegio. Los días 11 y 13 de febrero, los operarios del Ayuntamiento de Santa Eulària estuvieron en el colegio y «picaron una parte y dejaron todos los agujeros al descubierto», recuerda la presidenta de la APA.

Los padres, que han organizado varios actos de protesta, se muestran preocupados por el estado de la fachada y el peligro que supone para los niños, aunque desde la Conselleria d'Educació se mantiene que no hay ningun peligro para los escolares.