Sor Francisca Serra, religiosa de la Congregación de las Hermanas
de la Caridad de Formentera; Julià Vilàs Ferrer, fundador de la
Policlínica Nuestra Señora del Rosario, y Joan Prats, arquitecto y
alcalde de Eivissa entre los años 1979 y 1983, recibieron ayer de
manos del presidente de la Comunitat, Jaume Matas, los galardones
que les acreditan como Premi Ramon Llull 2004. En total, en el acto
celebrado ayer en sa Lonja de Palma se entregaron 22 premios y la
Medalla de Oro de la Comunitat, que le fue concedida a Llorenç
Fluxà Figuerola, un empresario mallorquín pionero en el mundo
empresarial de la exportación.
Francisca Serra recibe el premio en reconocimiento a su labor
social y asistencial llevada a término en beneficio de la población
de Formentera en la posguerra y por dedicar toda una vida a la
enseñanza.
Los méritos de Julià Vilàs, según la Comunitat, son la fundación
de la Policlínica Nuestra Señora del Rosario y su contribución a la
mejora de los servicios asistenciales clínicos de las Pitiüses,
apostando por la modernización.
Por su parte, el reconocimiento a Joan Prats es por su trabajo
continuado y largo de investigación y divulgación de la realidad
ibicenca en los campos de la cultura, la historia y la etnología,
además de por sus conocimientos del patrimonio histórico y
artístico de las Pitiüses.
La jornada no estuvo exenta de polémica, ya que una de las
premiadas, la escritora Antònia Vicens no acudió a recoger el
galardón en protesta por la política lingüística del Ejecutivo en
relación a la lengua catalana.
En esta oportunidad, el Ejecutivo balear ha extendido los
premios Ramon Llull a representantes de todos los sectores de
Balears, desde el mundo de la música, la medicina, el deporte, la
pintura, escritura, abogacía, arquitectura, investigación para
reconocer públicamente los méritos de los premiados.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Periódico de Ibiza y Formentera
De momento no hay comentarios.