Los trabajadores de Aena en el aeropuerto de Eivissa se han sumado a las convocatorias de huelga general en todos los centros de trabajo previstas para los días 5, 7, 9 y 12 de marzo contra el proyecto de contratación externa del 90 por ciento de las actividades que ahora desarrolla. Esta medida supondría, según los sindicatos, que el 70 por ciento de la plantilla actual (exceptuando el personal de control aéreo) quedaría afectado por el proyecto.

El comité reconoce que el gobierno ha emitido un comunicado en el que anuncia que retira ese proyecto. Entiende, sin embargo, que esta declaración de intenciones no es suficiente garantía de que no se continúe con el proceso de externalización que se lleva desarrollando en Aena desde aproximadamente ocho años «cuando el PP ganó las elecciones».

Para el comité de centro de Aena en Eivissa «la externalización de actividades supone, en la práctica, la privatización de Aena, puesto que toda la gestión y ejecución de sus actividades se contrataría con empresas privadas, manteniendo únicamente el control del desarrollo de las mismas (para lo que sólo necesitaría al 30 por ciento de la plantilla)».

En el proyecto no se incluyen garantías de estabilidad en el puesto para los trabajadores, aunque, «teniendo en cuenta lo que ha sucedido con otras empresas del entorno como Iberia, Telefónica y Trasmediterránea, se puede concluir cual va a ser el futuro de la plantilla», dicen los sindicatos.

El comité de huelga interpreta que el comunicado del gobierno desdiciéndose de sus intenciones iniciales «es un intento de evitar la ejecución definitiva de la huelga en unas fechas muy próximas a las elecciones; para, una vez pasada esta fecha, continuar con el proyecto que ahora dice que va a retirar», insiste el comité de centro.