Los meses de invierno mecen el puerto de Eivissa en una relativa calma que nada tiene que ver con la locura inadmisible de los meses estivales, retratada en prensa, denunciada por vecinos, soportada por empresas y pasajeros de navieras. Muchos de los afectados directamente por la prevista reordenación del puerto se preguntan cuándo se va a comenzar a hablar abiertamente de lo que se pretende hacer. El Ayuntamiento de Eivissa es una de las instituciones más implicadas e interesadas en que se abra el debate cuanto antes. Así, el consistorio desea que las obras de la avenida 8 d'Agost, que incluyen la instalación de canalizaciones para los conductos de Gesa y CLH desde el dique de Botafoc a los depósitos de ambas empresas y la urbanización y asfaltado de la calle vía, comiencen después de este verano, pero esta obra depende, señala la institución, de la reordenación integral de los usos del puerto, pendiente, como se ha citado, del mayor grado de consenso.

Sobre el proyecto de reordenación de las actividades portuarias la última novedad es que la Autoritat Portuària está estudiándolo para luego plantear los cambios a las autoridades implicadas: Ayuntamiento y Consell . Sobre la batimetría que se está realizando en el puerto a instancias de la Autoritat Portuària, esta institución manifestó que no implica una obra inmediata sino que es un estudio del fondo marino.

Los permisos de la obra civil, que corresponde al Ayuntamiento «están totalmente gestionados», afirman fuentes municipales, aunque «está pendiente un informe vinculante de Industria sobre la actividad de las instalaciones de CLH y Gesa». El proyecto de la obra civil del Ayuntamiento no está terminado «porque faltan por definir algunos aspectos que dependen de la reforma definitiva del puerto de Eivissa». El quid de la cuestión es saber donde estará el puerto industrial y las posiciones parece que no son coincidentes entre Autoritat Portuària y el Consistorio. El problema, además, es que el Ayuntamiento ha presupuestado una cantidad para la mejora de 8 d'Agost en los presupuestos de este año, partida que se completará con otra cantidad que se cargará a los presupuestos de 2005. Si el inicio de la obra se retrase más allá de después del verano, es decir, entrado 2005, «podría darse una situación complicada», señaló el Ayuntamiento.