Pere Palau podrá incorporar a su equipo de gobierno personas no elegidas en las urnas.

El Consell Insular dio luz verde ayer por unanimidad en el último pleno del año la aprobación inicial del reglamento orgánico de la institución, que, al amparo de la Ley de Consells, aprobada la pasada legislatura, regula el funcionamiento y la organización interna de la Corporación y, a su vez, permite la designación de consellers no elegidos en las urnas, como el caso del responsable de la Conselleria insular de Benestar Social, Vicent Serra.

Si el pleno del Consell aprueba la designación de Vicent Serra como conseller no electo (sólo se podrán nombrar cuatro) o bien el presidente Pere Palau delega la responsabilidad de los departamentos de Urbanismo y Turismo, que él mismo dirige, en otra persona la institución constituirá un Consell Executiu y funcionará como lo hace el Govern balear: el presidente designa a dedo a sus consellers que rinden cuenta de sus actuaciones ante la oposición en el Parlament, sean diputados o no.

Así, la oposición podrá solicitar una interpelación para que un conseller no electo (o ejecutivo), que no podrá ocupar un escaño en las sesiones plenarias, dé explicaciones por un asunto relacionado con su departamento.

El Pacte tendrá derecho a participar en la Comisión de Gobierno, órgano de decisión de la institución, que en este momento está limitado exclusivamente a los miembros del equipo de gobierno del PP.

El nuevo reglamento también fija las normas de funcionamiento de las sesiones plenarias, poniendo un límite de 10 minutos en las intervenciones de los consellers en los debates y, entre otras cosas, limitando también a 10 el número de preguntas de la oposición, que deben presentarse antes de la sesión en la Junta de Portavoces.