El alcalde de Eivissa, Xico Tarrés, dejó ayer muy claro que el PP «no tendrá el control del Consorcio Eivissa, Patrimoni de la Humanitat porque los estatutos no lo permiten». De esta forma, el primer edil respondió a las reclamaciones del Consell y el Govern que la pasada semana enviaron un escrito al Ayuntamiento en el que solicitaban que la junta rectora de este organismo se reuniera en el plazo máximo de una semana con la intención de que, entre otras cosas, se redujeran las competencias del primer edil como presidente del Consorcio y se destituyera al gerente, Emilio Pérez Echagüe.

Tarrés explicó que la normativa de esta entidad, que se dedica a gestionar los bienes declarados Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, establece «que el presidente del Consorcio es el alcalde de Eivissa y que la gestión de los proyectos le corresponde al Ayuntamiento» que, añadió «no puede perder su autonomía». Asimismo, aclaró que es el presidente del Consorcio quien elige a sus cargos de confianzas y que no lo puede hacer «un vocal de este organismo».

El primer edil explicó que «una cosa es que se llegue a consensos con todas las partes que componen el Consorcio para llevar a cabo los proyectos, que propone el Consistorio», pero que «lo lógico y lo sensato es que la gestión recaiga en las manos de la administración municipal». Tarrés calificó de «problema de preescolar» la situación que está planteando el PP y dejó claro que «por supuesto que se convocará la junta rectora pero cuando así lo decida el presidente del Consorcio».

Por otra parte, la concejala de Hacienda, Cristina Ferrer, explicó que en los presupuestos municipales para 2004 se incluye una partida para la amortización del préstamo que se solicitó para hacer frente a las inversiones de los tres primeros años de vida del Consorcio, cantidad a la que tienen que hacer frente las tres administraciones que forman parte del Consorcio, Consistorio, Consell y Govern.