Este convenio firmado en 1998 por el Gobierno y el Govern prevé,
para el caso de Eivissa, la reforma de la carretera de Sant Josep,
que ahora está en fase de licitación, el desdoblamiento del segundo
cinturón de ronda y una alternativa de acceso al aeropuerto. El
único proyecto previsto en el plan que ya está acabado es la
variante de Santa Eulària.
La reprogramación del convenio acordada ahora incorporará una
cláusula para avanzar anualidades a cuenta del presupuesto
autonómico, con el fin agilizar las obras. Esta medida hará posible
avanzar en la ejecución de las obras previstas en el convenio «y
recuperar más tarde el dinero a través del Ministerio», de la misma
forma que lo ha hecho el Ejecutivo canario, que al año siguiente de
la inversión recibe una transferencia de la cantidad invertida,
señaló Cabrer. El propósito es que «demorar una anualidad no sea un
problema» en el caso de que «el ritmo de las obras sobrepase el
gasto», aunque, no obstante, «la otra opción es que se gaste cada
anualidad como dice el convenio», precisó. La consellera de Obras
Públicas calculó que la nueva rúbrica del convenio de carreteras
podría tener lugar en un plazo de dos o tres meses, y tendrá en
cuenta estudios técnicos que están siendo confeccionados y que se
darán a conocer la próxima semana. Para concretar el contenido de
la reprogramación tendrá lugar una nueva reunión en Palma el
próximo mes de septiembre, avanzó Cabrer, quién lamentó que este
año únicamente se podrán iniciar las obras de acondicionamiento de
la carretera que une Eivissa y Sant Josep, porque el resto de
proyectos están en fase de redacción.
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