La Conselleria de Medi Ambient confía en que la contaminación de
carburante de los pozos de Santa Gertrudis, que según este
organismo se está dispersando, entre dentro de los parámetros que
establece la normativa y al final no sea necesario acometer su
descontaminación.
Por ello, la dirección general de Recursos Hídricos, dependiente
de Medi Ambient, llevará a cabo dentro de este mes una tercera
campaña de muestras de los puntos afectados por el escape de
carburante de la gasolinera de Santa Gertrudis para determinar si
la contaminación se ha disipado lo suficiente. «Tenemos indicios de
que la contaminación se está atenuando, que, por otra parte, es
normal. Además, el terreno tiene una capacidad importante de
atenuación», explicó ayer a este periódico el jefe de servicios de
estudios de este departamento del Govern, Alfredo Barón.
Una parte del carburante se volatiza y otra se va dispersando,
según explica Barón, por lo que la concentración va disminuyendo
hasta que entra en los límites que fija la ley. «Esto se comprobará
en la campaña de muestras que haremos ahora en julio», dijo. La
Conselleria, por otro lado, está a la espera de recibir el
resultado definitivo de la segunda campaña de muestras, realizada
para calcular la velocidad e intensidad de propagación de los 2.349
litros de gasolina 98 sin plomo que se fugó de uno de los tanques
de la gasolinera en septiembre del año pasado.
Barón apunta que se establecerá un sistema de prevención en la
gasolinera, con un sistema de sonda en el entorno de los tanques de
combustible para evitar que el problema se repita en el futuro, y
que en el caso de que finalmente haya que proceder a la
descontaminación de todo el acuífero superficial (al profundo ha
llegado el carburante, pero no excede los parámetros que marca la
ley) será necesario un año de trabajo.
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