La Junta Rectora del Consorcio 'Eivissa, Patrimoni de la Humanitat' aprobó ayer en una reunión extraordinaria la financiación que permitirá abrir un pasaje que comunique el Racó de sa Murada con el Racó de Santa Llúcia, en sa Penya. El proyecto, contemplado en el Plan Especial de Reforma Interior (Pepri), dispondrá de un presupuesto aproximado de 120.000 euros para llevar a cabo, entre otras cosas, la expropiación y la demolición de las tres viviendas situadas en ambas calles, que permitirán hacer realidad la conexión.

Por otra parte, el Consorcio dio el visto bueno a la adquisición de cuatro inmuebles en sa Penya. Como explicó el gerente, Emilio Pérez Echagüe, dos de las edificaciones, ubicadas en el 'carrer Fosc', se rehabilitarán para convertirlas en viviendas. Los dos inmuebles restantes, situados en la plaza de sa Drassaneta, junto al edificio que el Ayuntamiento posee en la zona, permitirán crear un pasadizo entre la plaza y el callejón del Gallo, proyecto que está contemplado en el Pepri. Además, se aprovechará el espacio para construir una nueva vivienda o ampliar, si es necesario, el inmueble municipal.

La Junta Rectora aprobó también la liquidación del presupuesto y las cuentas del 2002, además de dar el visto bueno al borrador del pliego de condiciones de prescripciones técnicas y administrativas para la rehabilitación de Can Botino. El Consorcio planteó la necesidad de solicitar la autorización del Consell, copropietaria del inmueble, para realizar la contratación del proyecto y las obras de reforma de Can Botino.