El concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Eivissa, Joan Bonet,
adelantó en declaraciones a este periódico que la estación de
autobuses, contemplada en el avance de la revisión del Plan General
de Ordenación Urbana (PGOU) del municipio, podría albergar la
oficinas principales de la Policía Local, que ahora están ubicadas
en la calle Vicent Serra i Orvay. Éste podría ser uno de los
servicios municipales que acogería la futura terminal de transporte
público, proyectada en el solar ubicado detrás del instituto sa
Colomina, junto a la avenida de la Pau, y entre las calles Sant
Cristófol y Canàries.
Bonet explicó que «la idea es que la estación sea un centro
intermodal que, a parte de los servicios básicos necesarios como la
plataforma para los autocares o las taquillas de venta de billetes,
albergue dependencias municipales como las de carácter
policial».
Precisamente para favorecer la 'intermodalidad' de esta
infraestructura, que se calcula que pueda ocupar unos 12.000 m,
está previsto crear un aparcamiento subterráneo con capacidad para
aproximadamente 500 vehículos, y una parada de taxis. Además, se
destinará otra zona a usos comerciales para la ubicación de
cafeterías y establecimientos de diverso tipo.
Junto a los servicios públicos, la empresa que se haga con la
concesión de la estación de autobuses dispondrá también de oficinas
y dependencias que podrá adjudicar para otorgarles otras
funcionalidades.
Según el concejal de Urbanismo del consistorio de Eivissa, la
futura terminal del municipio podría llegar a costar en torno a los
12.026.458 euros (unos dos mil millones de pesetas), aunque esta
cantidad podrá variar en función de los proyectos y los
correspondientes presupuestos que presenten las diversas entidades
que concurran para llevar a cabo esta infraestructura.
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