L a Trobada d'Escoles ha vuelto a las aulas. Ayer se dejó sentir
en las de los colegios Poeta Villangómez y Cas Serres de Eivissa y
en el auditorio de Can Ventosa, y desde hoy hasta el viernes se
paseará por todos los centros públicos de Primaria y Secundaria de
la isla cuyo alumnado se reunirá el próximo sábado en el colegio
Portal Nou de Eivissa para participar en la fiesta de clausura de
este evento promovido desde la Associació Pitiüsa per a la
Renovació Pedagògica, la Federació d'Associacións de Pares i Mares
d'Alumnes d'Eivissa y el Institut d'Estudis Eivissencs.
Paralelamente, los alumnos de Secundaria también vivieron ayer una
jornada especial. Jóvenes de los institutos Blanca Dona, Sa
Colomina, Santa Maria y Xarc representaron distintas obras de
teatro en catalán. Los alumnos de 4º de ESO del Blanca Dona
representaron 'Una escena i un somni', de Esperança Marí, los de Sa
Colomina la obra 'Les llengües del món', y los alumnos del Xarc 'La
pela és el pela', una obra en clave de humor.
Con el objetivo de promover el uso del catalán y de dar a
conocer aspectos de la cultura popular y tradicional de las
Pitiüses, escolares del Poeta Villangómez y Cas Serres participaron
en una jornada lúdica y de interrelación: Los alumnos de Infantil y
primer ciclo de Primaria de ambos colegios se reunieron en las
aulas de la escuela de Cas Serres y los de segundo y tercer ciclo
de Primaria se juntaron en el Poeta Villangómez.
Los más pequeños recorrieron un circuito de juegos desde primera
hora de la mañana con talleres de maquillaje, confección de
collares con macarrones, globos mágicos rellenos de harina y
caramelos, baile y un cuentacuentos. «Cada alumno tiene un carnet
que se sella cada vez que ha participado en uno de los juegos»,
señalaba una de las profesoras. Tras escuchar la historia de un
dragón, un gallo, una oveja y un cerdo, a cargo de las profesoras
de Inmersió Lingüística, los pequeños colorearon los distintos
personajes del cuento para montar la historia en un gran mural. Una
merienda a base de macedonia de frutas, bocadillos, zumos y alguna
que otra golosina marcó el punto de inflexión del programa. Tras el
tentempié, los pequeños practicaron con los juegos populares, algo
que también realizaron los mayores en el Poeta Villangómez.
Les xapes, la baldufa, les baletes, el marro, la corda, el
mocadoret o a picar mans fueron algunos de los juegos en los que
participaron los chavales, muchos de los cuales descubrían por
primera vez muchos de los pasatiempos de generaciones de padres y
abuelos pitiusos.
«Han empezado participando en un cross en el parque en el que
han corrido todos los chavales juntos y ahora están visitando las
distintas zonas habilitadas con distintos juegos para que todos
participen en la totalidad de atracciones», señaló Adela Pueyo, la
directora del colegio Poeta Villangómez. Al igual que la directora
del Cas Serres, Dolors Cabanes, Pueyo señaló que más del 90 por
ciento de su alumnado no es catalanoparlante. «La mayoría hablan en
castellano porque se trata de alumnos originarios de la península,
Latinoamérica o Marruecos pero los más pequeños, se adaptan
enseguida y aprenden», dijo antes de revelar que, contrariamente a
los que parezca, son los alumnos extranjeros los que menos
problemas de resistencia a la integración lingüística ofrecen,
«principalmente porque no tienen prejuicios», matizó.
E.E.
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