La directora gerente del Institut Balear d'Afers Socials (Ibas), Josefina Santiago, inauguró ayer el nuevo centro base ibicenco de valoración del grado de discapacidad de las personas, situado en el número 47 de la calle Abad i Lasierra (cerca de la Policía Local).

«Era un objetivo de la Conselleria de Benestar Social la descentralización del máximo de los servicios», señaló Santiago, que recordó que ya tienen equipos en todas las islas. La responsable reconoció que reunir a todo el equipo ha sido difícil «por las dificultades de contratación que se registran en las Pitiüses».

El año pasado se realizaron 400 valoraciones sobre discapacidad en Eivissa por lo que parece claro que la actividad del centro está más que garantizada. Además, «será un punto de atención e información de todos los servicios que da el Instituto Balear de Affers Socials como pensiones no contributivas o la tarjeta básica», remarcaron ayer durante su presentación.

El Ibas agradeció al Consell que les prestase unos locales durante el año y medio en el que han tenido actividad sin sede.

El centro cuenta con una gran sala de reuniones también utilizable por las diferentes asociaciones dedicadas a las personas con discapacidad si lo necesitan.

La función del centro es valorar la discapacidad, independientemente de la tipología física, psíquica o sensorial. En este organismo tienen cabida los afectados por Alzheirmer, que en un nivel avanzado de puede ser considerados con discapacidad.

La instalación está en locales alquilados que cuestan 18.000 euros mensuales, mientras que adecuar el bajo a las necesidades con muebles, separaciones y material informático, ha costado 102.170 euros aproximadamente (17 millones de pesetas).

La presidenta del Consell, Pilar Costa, asistió a la inauguración y resaltó «el enorme trabajo» se ha realizado en este campo. «Los avances en asuntos sociales han sido importantes pero no suficientes» y remarcó que se han puesto los pilares y las bases para un trabajo de futuro.