El dique de Botafoc, «la obra más importante que ha ejecutado la Autoritat Portuària de Balears en los últimos años», según recordó ayer Francesc Triay, presidente de la Autoritat Portuària, se inaugurará el próximo 15 de abril tras más de dos años de trabajo intenso y continuo. Finalmente ha costado 48 millones de euros, un 25% más de lo inicialmente previsto, que eran 33 millones de euros (5.500 millones de pesetas). El organismo portuario ya se ha comprometido a afrontar la cantidad de sobrecoste, unos 15 millones de euros, dado que la Unión Europea se comprometió a pagar una cantidad fija (28'1 millones de euros), el 85 por ciento sobre la cantidad inicial presupuestada. Entre la cantidad de sobrecoste y la que inicialmente tenía previsto abonar Puertos del Estado suman unos 20 millones de millones de euros.

La actividad marítima comenzará partir del día 15 «paulatinamente», explicó el presidente que aseguró que los ciudadanos podrán disfrutar desde ese mismo día del carril bici, del parque para los niños y del paseo marítimo de más de un kilómetro, que se alarga mediante una pasarela sobre el espaldón del dique. La obra está prácticamente finalizada. Los obreros y las máquinas trabajan a un ritmo acelerado para colocar adoquines, farolas, asfalto y sellar juntas. El muelle luce las enormes barreras-escudo que impiden que los barcos choquen contra el muelle; hay vegetación plantada; mobiliario urbano perfectamente colocado e incluso parte del parque infantil. «Se está notando -recordó Triay- como se han calmado las aguas interiores del puerto; la quietud de las aguas no tiene comparación».

El siguiente paso será lograr que, una vez que pase el verano, las empresas concesionarias, CLH y Gesa, puedan instalar sus tuberías para recibir los petroleros en el dique. «Será un aumento importante de seguridad», dijo. Además, Triay aseguró que el calado del dique, unido a su longitud, será una «gran mejora para el puerto» al permitir dar entrada a determinados barcos, sobre todo de pasajeros (cruceros). Si todo sale como está previsto, el ministro de Fomento, Francisco Àlvarez Cascos, asistirá junto con el presidente del Govern, Francesc Antich, a la inauguración de esta obra.