El parking contará, según el proyecto, con dos puntos de entrada
y salida y uno de emergencia. En el interior, las plazas de
estacionamiento estarían delimitadas con un cobertizo con techo de
cañizo, idéntico al aparcamiento de Illetes, en Formentera. «Viene
a ser el mismo, incluso el material utilizado», explica el
encargado de Ibifor, Joan Cardona.
En el interior del parking también se incluirán dos áreas
arboladas de 4.000 metros cuadrados. No obstante, hay una sentencia
que obliga a Dunasal Park a reforestar de pinos una zona de 6.000
metros cuadrados en el interior del terreno que se utilizará para
la instalación de este parking, por lo que seguramente la
administración obligará a reducir el número de plazas previstas en
el anteproyecto.
Paradójicamente, Ibifor hizo una denuncia penal en contra de
Dunasal Park por abrir sin la correspondiente licencia un parking
de pago en su terreno. Eso ocurrió el verano pasado, provocó un
caos en el tráfico durante unos días y obligó al Ayuntamiento de
Sant Josep a intervenir para ordenar su cierre y despejar el paso
de servidumbre, que había sido bloqueado. Esta denuncia está en
fase de investigación en el juzgado de instrucción número uno.
Ibifor presentó la denuncia al entender que, como vecinos y
empresa, se había visto perjudicado por el cierre del paso.
Por su parte, Ibifor también tiene abierto un contencioso
administrativo en contra de la Conselleria de Medi Ambient del
Govern porque desde 1999 solicitan sin suerte la apertura de un
aparcamiento, con la instalación de techos de cañizo para cada
plaza (300 en total), en los 6.500 metros de su propiedad
instalados en el terreno de su propiedad situado frente al colegio
de ses Salines.
Sin comentarios
Para comentar es necesario estar registrado en Periódico de Ibiza y Formentera
De momento no hay comentarios.