El Consell Insular lleva el lunes a pleno la solicitud de un
préstamo bancario de 6'6 millones para financiar la construcción de
la residencia para mayores de Santa Eulària (6'5 millones de euros)
y el centro de día de Formentera. El Govern balear será quién se
haga cargo de las cuotas del préstamo que se amortizará en 10 años
y con el pago final de dos millones de euros (332 de pesetas).
El Govern tiene que financiar estas dos obras en base a la Ley
de traspaso de competencias en bienestar social, que entró en vigor
el 1 de enero de 2002, para compensar el déficit histórico de
infraestructuras sociales en las Pitiüses.
Tanto el PP como Els Verds no entienden por qué el Consell
Insular tiene que endeudarse para la construcción de estos dos
edificios, cuando, según la citada ley, es competencia exclusiva
del Govern. «El responsable de la financiación es el Govern. Aunque
después se lo devuelvan, el Consell no tiene que endeudarse», dice
el conseller popular Antoni Marí Calbet. El portavoz de Els Verds,
Joan Buades, añade que los ciudadanos pagarán un suplemento de dos
millones de euros de intereses, que «podría invertirse en la
construcción de otras infraestructuras necesarias o la puesta en
marcha de un programa contra la drogadicción».
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