G. Romaní20/03/03 0:00
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Juanma Costa Escanellas ha sido nombrado oficialmente candidato por el Partido Popular a la alcaldía de Formentera en una rueda de prensa a la que asistió el presidente del PP pitiuso, Josep Juan Cardona, y el candidato de los populares al Consell d Eivissa i Formentera, Pere Palau. Costa ha señalado que el objetivo político de la formación es «recuperar fuerza y el apoyo social que el PP había tenido en épocas anteriores». Asimismo, manifestó su intención de ser «la alternativa municipal a la COP en el Consistorio» y ello lo fundamenta en tres vertientes como son «el reconocimiento exterior de Formentera para que sea lo que realmente es y lo que sufre en función de su insularidad»; y la necesidad perentoria de «crear unas bases de futuro que permitan subsanar las carencias y deficiencias de la isla mediante la decidida actuación de las administraciones central, autonómica e insular que deben centrarse de forma decidida en Formentera».

El presidente de la formación popular y candidato al Consistorio ha afirmado su voluntad de «propiciar un ayuntamiento abierto a todos los ciudadanos para que su participación en el devenir sea eficaz, para lo que es imprescindible, potenciar el nexo de comunicación entre las partes a fin de que los formenterenses puedan ver plasmadas sus ideas e inquietudes».

Josep Juan Cardona, por su parte, ha resaltado que «como partido el PP es el primero en Formentera a tenor de las actas de de las pasadas elecciones generales y eso se va a ver y notar en los próximos comicios del 25 de mayo». El líder popular señaló que gracias al trabajo del PP en Formentera se ha superado en mucho «por equipo, por actuación conjunta y por voluntad de servicio» el status del 99 cuando la disidencia interna fragmentó el partido que acabó perdiendo su representación en el Consistorio.

Por su parte el candidato a la presidencia del Consell d'Eivissa i Formentera, Pere Palau, ha afirmado la «voluntad de gobernar para todos los ciudadanos y suprimir barreras entre la administración y el pueblo», tarea que está convencido poder llevar a cabo desde la presidencia del Consell tras la debacle del Pacte que «ha perdido cuatro maravillosos años para paliar las deficiencias de las Pitiüses y, sin embargo, ha sido incapaz de hacerlo», remarcando que ha sucedido con un gobierno autonómico del mismo signo político.