La venta de coches sufre una importante desaceleración debida al miedo del consumidor a asumir gastos importantes.

LAURA FERRER ARAMBARRI/EFE

La caída de matriculaciones en Eivissa y el resto del archipiélago es bastante superior a la media nacional, del -5,57 por ciento en relación al mismo mes de 2002, según datos difundidos esta semana por la Dirección General de Tráfico. El problema en Eivissa no sólo se debe al descenso del consumo privado sino a que «las flotas de rent a car también están a la expectativa», según Colomar, ya que «nadie quiere comprar coches de alquiler antes de Semana Santa» con el fin de ajustarse a la demanda real y rentabilizar la inversión.

Colomar considera que hay una cierta «psicosis» de que el turismo pueda caer en picado y apunta a que «se está exagerando un tanto la crisis». Las noticias negativas sobre reservas y las consecuencias de una posible guerra han ido calando en la conciencia de los consumidores particulares que «han perdido mucha confianza en el futuro y cuando esto sucede se recorta el gasto».

«El sector espera que esta situación no sea a la larga sino pasajera y puntual», deseó el presidente de Prodeco que dijo tener «fe» en que a partir de julio «se produzca una recuperación importante del consumo».

Las matriculaciones cayeron en todas las comunidades durante el mes pasado excepto Aragón, Castilla-La Mancha, Extremadura y Galicia. En los dos primeros meses del año, cinco comunidades mantienen tendencia positiva: Aragón, Cantabria, Castilla-La Mancha, Extremadura y Galicia.