La Comisión de Control del Plan Especial de Protección y Reforma
Interior (Pepri) del Ayuntamiento de Eivissa aprobó esta semana la
primera parte del proyecto de pavimentación de las calles rodadas
de Dalt Vila.
Ahora, el Consorcio Patrimonio de la Humanidad, sacará a
concurso la adjudicación de la primera y segunda fase de las obras,
que abarca las calles Joan Roman y Pere Tur. El gerente del
Consorcio, Emilio Pérez Echagüe, calcula que en un plazo de un mes
y medio ya estará asignada la empresa contratista.
El proyecto, realizado por el gabinete de arquitectos Marc Tur y
Oriol Batchelli, contempla la instalación de un pavimento de
granito de seis centímetros de espesor sobre el asfalto. El suelo
tendrá un toque de color terrizo, que ganará intensidad con el
brillo del sol.
Los arquitectos apuntan, de todos modos, que la intervención
será sencilla para que ésta no destaque sobre el conjunto
histórico. «La función de este pavimento es la de dignificar la
zona», aseguran. La primera fase de la obra va del convento de la
calle Joan Roman hasta el final de la vía. La segunda arranca desde
el inicio de la calle Pere Tur hasta el Ayuntamiento.
Las dos primeras obras se ejecutarán en base a los presupuestos
del Consorcio previstos para 2003. El proyecto integral de
pavimentación continuará por la calle General Balanzat hasta llegar
al exterior de las murallas, que se acometerá más adelante.
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