La bajada de los accidentes laborales en las Pitiüses se constatan con los datos de 2002. El año pasado se produjeron en Eivissa y Formentera un total de 3.011 accidentes en el trabajo, de los cuales 2.996 fueron leves, 14 graves y sólo uno mortal. Estas cifras suponen una importante reducción con respecto a los resultados del año anterior, cuando hubo un 13 por ciento más de accidentes, según informó ayer la Conselleria de Trabajo del Govern. que destacó, sobre todo, la reducción de los siniestros laborales graves y mortales.

Así, en el 2002 sólo una persona murió por esta causa, frente a las cuatro que perdieron la vida en el 2001 y las cinco que fallecieron en sus puestos de trabajo en el 2000. Los accidentes graves pasaron de 47 en el 2001 a 14 el pasado año, con lo que la reducción porcentual se calcula en un 70 por ciento. Por sectores, los accidentes también se han reducido, dado que los servicios registraron 1.902 percances, un 12 por ciento menos que en el 2001; la construcción 915, un 11 por ciento menos; la industria 185, frente a los 247 del 2001, y la agricultura sólo nueve, cuando el año pasado registró 14.

Balears, en general, registró un destacado descenso de los accidentes de trabajo en el 2002, cuando murieron 4 personas frente a las 23 del año anterior (82,6 por ciento menos) y cayeron en un 26 por ciento los siniestros graves al pasar de los 307 de 2001 a los 227 de 2002. Según los datos facilitados ayer por el Govern, también disminuyeron los accidentes leves en un 5,7 por ciento al situarse en el 2002 en 28.577, por lo que Balears ha sido la única comunidad autónoma española en la que el pasado año descendieron los tres tipos de accidentes en el trabajo: mortales, graves y leves.