En esta segunda gala de 'Operación Triunfo' Miguel Àngel Silva sufrió un poco menos ya que fue uno de los primeros en recibir la nota de su actuación, con un buen aprobado. Jorge Flo, uno de los miembros del jurado, fue el encargado de comunicar al ibicenco que no estaba nominado: «Tras haber estado nominado en la primera gala has recibido una sobredosis de optimismo y volverás a tener una semana más problemas con tu dieta porque te quedas», sentenció el miembro del jurado que recibió a cambio una orgullosa sonrisa del ibicenco.

La segunda gala de 'Operación Triunfo' contó, al igual que la primera, con un alto nivel en la calidad interpretativa de todos sus concursantes, que a lo largo de los últimos ocho días han trabajado duro sus respectivos temas, todos interpretados a dúo o trío. A pesar de conocerse poco, tanto Miguel Àngel Silva como su compañero de actuación, Danni Úbeda, demostraron complicidad en el escenario, algo que fue captado por el público y el jurado, que no penalizó a los dos jóvenes que bordaron con sus chorros de voz el 'Dónde van', de Diego Torres.

El ibicenco y su compañero se hicieron esperar y saltaron al escenario en octavo lugar comentando antes con Carlos Lozano las incidencias de sus primeros ocho días de Academia y trabajo en común, así como un resumen con imágenes individuales de cada uno de ellos. Los pequeños contratiempos de Micky para seguir su dieta a base de arroz cocido, pollo y varios litros de agua, fue uno de los temas más comentados en la gala. Y es que a Miguel Àngel Silva le gusta cuidarse y está habituado a seguir unas pautas alimenticias que en la Academia, de momento, no ha podido seguir.

Pero para restar seriedad al tema, el ibicencio comentó que también se ha divertido al señalar que «yo también soy de los que está en medio del cachondeo». De este, modo restó importancia al tema ante el presentador, antes de ver en imágenes el duro trabajo que ha realizado junto a Danni Úbeda para conseguir que éste se soltase para cantar y bailar a la vez con naturalidad.

Con los ojos brillantes de emoción y muy seguro de sí mismo Miguel Àngel Silva saltó al escenario ataviado con una camisa morada y un pantalón negro, sus prendas habituales, para entonar a dúo su tema, con el que movió su esqueleto de manera mucho más natural que su compañero, más pendiente de los pasos del joven policía local de Sant Antoni. Las tablas de Miguel Àngel Silva al frente de la orquesta Camicie en Eivissa le sirvieron para mostrarse ante las cámaras y el público como pez en el agua, sosteniendo la mirada de la cámara y dando una imagen de comodidad y mucho dinamismo durante su interpretación.