El senador por Balears, Manuel Cámara, dijo ayer que no sólo apoya la reivindicación de los propietarios de terrenos afectados por la ampliación del aeropuerto sino que considera «una barbaridad» la previsión del Gobierno conforme a la que el centro pitiuso precisa contar con instalaciones para recibir a unos ocho millones de pasajeros al año. «Hay que apostar por el aumento del bienestar y de la economía pero no llegar a cifras tan alarmantes», dijo ayer tras reunirse con los vecinos afectados.

Cámara anunció que pedirá al Gobierno central que paralice el proyecto de ampliación del aeropuerto de Eivissa hasta que éste haya sido consensuado con el Govern y el Consell Insular. Solicitará también la comparecencia del ministro de Fomento, Àlvarez Cascos, en la comisión de infraestructuras para que justifique la necesidad de la ampliación e intentará que el ministro reciba a los senadores por Balears, a una representación de los vecinos afectados y a las instituciones insulares para tratar los hechos cara a cara.

Además, el senador presentará enmiendas a los presupuestos de 2003 en lo que respecta a las primeras inversiones para el aeropuerto de Eivissa relacionadas con la ampliación del mismo. «Quiero "dijo" que el senador Enrique Fajarnés vote a favor esta enmienda» y remarcó que «debe mojarse» contra esta obra. Cámara aseguró ayer que le «encantaría sentarse» con Fajarnés «para discutir y llegar a puntos comunes». Apuntó que no descarta intereses especulativos en la ampliación del aeropuerto: «Invertir ahora para que luego Aena desaparezca de la gestión del aeropuerto». El senador recordó que la privatización de Aena era un objetivo del PP.