La planta asfáltica de Montecristo carece de licencia de funcionamiento

El ingeniero del Ayuntamiento advirtió «deficiencias en las instalaciones eléctricas de baja tensión y en las instalaciones petrolíferas». Precisamente, los vecinos se quejan del «fuerte olor a gasóleo» que desprende la planta, que se cuela en sus viviendas.

En las conclusiones del informe, el ingeniero señala que «no se debería conceder la licencia de apertura y funcionamiento sin justificar la subsanación de las deficiencias encontradas». En teoría, esa industria tampoco debería funcionar sin disponer previamente de esas licencias. En ese documento también remarca «expresamente el ámbito temporal, dos meses», de la fábrica. El objetivo de esa planta es asfaltar el polígono. En el último pleno de la Corporación, el alcalde, Antoni Marí Tur, aseguró que NYC dispone de una «licencia provisional de dos meses» para acabar ese trabajo. Una fuente del Consistorio indicó que sólo tiene de una licencia de instalación.

El informe fue elevado a la comisión de gobierno que se celebró el 10 de septiembre, en la que se acordó dar traslado del su contenido a NYC para que subsanara, en un plazo máximo de tres meses, las deficiencias. La empresa no ha dejado nunca de funcionar, a pesar de carecer de la licencia preceptiva.