La Fiesta del Agua es una de las más esperadas del verano.

L a Fiesta del Agua es la más representativa de esta discoteca ubicada en el centro del pueblo de Sant Antoni. El acontecimiento tiene lugar una vez al año durante el mes de agosto y sólo se puede acudir con la invitación que reparte el organizador del evento y jefe de la discoteca, José Aguirre. «Es una fiesta de amigos, la hago para ellos» comenta. El elemento esencial es el agua, que transforma la pista central de la discoteca en una piscina en la que los asistentes bailan durante todo el día manteniéndose frescos como peces en el mar. Sobre las 15'00 horas se puede degustar un delicioso plato de paella.

La idea de organizar una fiesta de estas características nació del origen de la misma discoteca. Todo comenzó hace 28 años cuando José Aguirre y un amigo vinieron de vacaciones a Eivissa, ambos quedaron fascinados, la isla les deslumbró, « era un paraíso terrenal», por eso decidieron quedarse y montar la discoteca en cuyo centro pondrían una fuente. El día de la inauguración del local fue el inicio de la fiesta del agua.

Era la 13'30 del mediodía de ayer, cuando las camareras ya estaban preparadas tras las barras de la discoteca a la espera de clientes sedientos, todas ellas con el mismo atuendo, que consistía en un bañador y un pareo atado a la cintura. A esa hora el ambiente se presentaba tranquilo, todavía no había comenzado a sonar la música, los últimos preparativos estaban llegando a su fin. Poco tiempo después, el organizador informaba a los presentes a través de los altavoces que se subía el telón, se iba a dar paso a la apertura de la fiesta, «terminantemente prohibido tirar a la gente al agua» informó reiteradamente al público asistente que no paraba de llegar.

A continuación empieza a sonar la música (latin, house, tambores africanos y otras tendencias) mientras se reparten enormes trozos de sandía, el público asistente conversa y comienza a mover tímidamente el esqueleto. Pronto, tiene lugar la apertura de la pista que ya esta cubierta de agua, la gente salta a su interior, el ambiente acoge rápidamente otro tono. A las 15'40 se da paso a la comilona en la terraza, los cocineros reparten platos de paella a destajo y trozos de pan pagés.

Agua y luz.
Los rayos de sol que entran por las cristaleras superiores, el agua que inunda la pista y el color blanco del interior de la discoteca, son los elementos que la convierten en una representación de todos los rasgos que caracterizan a la isla de Eivissa, calificada como «Es Paradís Terrenal». Ayer tuvo lugar la Fiesta del Agua, una de las más esperadas del verano, que cumplía 28 años. «El evento sigue teniendo las mismas características que tenía en sus inicios» comenta José Aguirre, fundador de la fiesta.