La Red Temática I+D en Turismo Cultural, integrada por distintas instituciones y universidades catalanas, ha elegido Eivissa, concretamente sus bienes declarados Patrimonio de la Humanidad, para analizar cómo se puede sacarles el máximo rendimiento para atraer al llamado turismo cultural, que actualmente en España ya supone el 8 por ciento del total de la industria del ocio.

Jordi Juan, de la Universidad de Barcelona, visitó el viernes por la tarde junto a doce miembros más de esta red, financiada por el Pla de Recerca de la Generalitat de Catalunya, la zona de Dalt Vila, el Museo Arqueológico y el Museo de Arte Contemporáneo. Durante todo el día de ayer intercambiaron opiniones con los representantes de las instituciones de la isla, incluidos la Federación Hotelera y otros colectivos relacionados directamente con el turismo. Ahora este equipo redactará un informe meramente consultivo sobre qué cabe potenciar para captar la atención del turismo cultural.

«Hay que vender la imagen de Eivissa como algo más que el sol y la playa. El turismo cultural es un complemento añadido que posibilita extender la actividad turística durante todo el año», explica Jordi Juan, que hace especial hincapié en que el turista cultural no busca sólo ver monumentos. «Las muestras de la cultura popular, incluido la gastronomía, son aspectos de Eivissa que hay que impulsar», dice.