El Ayuntamiento de Eivissa cobrará 56.000 euros (casi 9'5 millones
de pesetas) por la concesión de una licencia de taxi en el
municipio. Así se ha fijado en la modificación y ampliación de la
ordenanza fiscal reguladora de la tasa de licencias que ayer aprobó
el pleno con el voto en contra de la oposición. Hasta ahora el
Ayuntamiento sólo cobraba los trámites administrativos necesarios
para hacer efectiva la concesión que, según el presidente de la
Asociación de Taxistas de Eivissa, Juan Marí, en ningún caso
superaba los 600 euros (100.000 pesetas).
La nueva ordenanza también establece que el Ayuntamiento
reembolsará los 56.000 euros cuando el titular no quiera seguir
explotándo la licencia. Eso sí, en el caso de que la traspase a un
tercero, el Ayuntamiento percibirá 8.000 euros por la operación.
«Este es el primer paso para acabar con el mercado negro», señaló
Juan Marí ayer a este periódico.
Por su parte, el Grupo Municipal del PP criticó esta tasa, a la
que considera más bien una fianza. El concejal Vicente Serra
reclamó al Ayuntamiento una vez más que saque a la calle cuatro
nuevas licencias para minusválidos y que aumente el cupo con otras
13 licencias más de taxis convencionales, tal y como establece la
nueva fórmula del Govern balear. «¿Por qué 13 y no 17? Nosotros
nunca hemos dicho que no vayamos a conceder más licencias, pero
antes insisto en que queremos poner orden al sector», reiteró el
edil de Gobernación, Pedro Campillo.
Asimismo, el PP también recriminó al equipo de gobierno que en
el caso de que una persona no pueda explotar una licencia y su
hijo, por ejemplo, no tenga la edad para conducirlo, el
Ayuntamiento recuperará la concesión, con el pago de 56.000 euros.
«Una licencia no es como si a uno le toca la lotería, cuyo premio
es para toda la vida. De esta forma hacemos valer el principio de
igualdad para todo el mundo», subrayó el concejal de
Gobernación.
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