La dirección general de Agricultura del Govern publicó el pasado día 10 en el BOIB las normas que deben seguir los agricultores para que sus tomates, patatas y pimientos puedan acogerse a una nueva denominación genérica bautizada como «producción integrada». Se trata, según explicó el conseller insular d'Agricultura, Vicent Tur, de un tipo de producción agrícola a caballo entre la convencional y la ecológica, de manera que se pueden emplear ciertos productos químicos para acabar con las plagas y para fortalecer las plantas, pero a niveles mínimos. Así, no se produce el exceso de los cultivos convencionales, pero tampoco se peca por defecto, como en los ecológicos.

Cada producto tiene su propio reglamento, que varía según las cantidades y tipos de sustancias que pueden utilizarse . A la patata, el pimiento y el tomate, los tres primeros vegetales que disponen de un reglamento de «producción integrada», seguirán en un futuro próximo más frutas y hortalizas. Uno de los productos que los profesionales ibicencos desean incluir rápidamente en esa denominación es la naranja, según señaló Vicent Tur.

Aunque no hay previsiones del número de agricultores que harán uso de esa denominación, Tur adelantó que esta iniciativa tendrá mucho éxito en las Pitiüses, dado que desde la propia Agroeivissa se pidió el impulso de esta idea, que a través del Consell se comunicó al Govern, institución que finalmente la ha puesto en práctica mediante la elaboración de los reglamentos.

El conseller d'Agricultura destacó que la «producción integrada» resulta «menos agresiva con el medio ambiente» que las convencionales y que existe un importante mercado para este tipo de productos.

La etiqueta será una garantía para los consumidores, ya que al adquirirlos sabrán que se han empleado en ellos cantidades mínimas de agresivos químicos y fertilizantes.